Kamajanes de la música palenque

Cantando en castellano y en su ancestral lengua palenquera, Son Palenque es integrado por ocho músicos bajo el liderazgo de Justo Valdés, un hombre que a sus 62 años ha combinado la composición musical con otros oficios que le han permitido sobrevivir: agricultor en su pueblo natal, albañil o vendedor de gafas a los turistas que visitan las playas de Cartagena. Entre sus méritos, le corresponde también el honor de haber escrito el himno de San Basilio de Palenque, el cual cuenta la heroica fundación de su pueblo en el siglo XVII.
Su primer sencillo data de 1980, dejando uno de los primeros registros que se tengan noticia de una canción  grabada en palenquero. Posteriormente, trascurriría década y media de éxitos en los picós, el mercado de Bazurto y los barrios populares de la Ciudad Heroica como impulsores de la champeta criolla, esto es, la integración de la terapia urbana con instrumentación, voces y ritmos tradicionales del folclor. De esa fase se destacan tres discos de larga duración editados por CBS.Hoy, a casi veinte años de su última grabación, Son Palenque está de vuelta. Con la producción de Lucas Silva y en sesiones realizadas en Bogotá y Cartagena, la agrupación fue invitada a exponer y registrar de nuevo su talento. El resultado da razón de la admiración que hace tres décadas estos ídolos registraron en la barriada. Con todos sus temas hechos éxitos en el submundo del picó, hoy están de recgreso la percusión palenquera, el saxofón dulce, la instrumentación eléctrica y las tradiciones sonoras del bullerengue (antiguo canto de trabajo), el lumbalú (canto fúnebre), la creación propia etiquetada como “ritmo son palenque” y claro, la champeta criolla.
Panamérika